• hace 3 años
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Esta semana fue distinta a todas. La vuelta de los ex participantes de MasterChef Celebrity en el repechaje -para ganarse un lugar de nuevo en el concurso- le puso todavía más picante al programa de cocina. Anoche quedó demostrado después de la gala que definió el regreso de dos jugadores que habían quedado fuera de concurso. La tensión y emoción que se vivió en la competencia fue digna de una final. Todos le pusieron el alma a la última prueba pero algunos corrieron con más suerte que otros. 

En principio se anunció un solo ganador: el Mono de Kapanga, uno de los favoritos del público que dejó mudo al jurado con sus dotes para la pastelería. Aunque la cocina no es su fuerte –así lo había demostrado durante su fugaz paso por el programa- esta vez sus ganas de volver lo motivaron tanto que se inspiró. ¿Qué receta le dio el pase de vuelta al programa? Una clásica torta de brownie con merengue y dulce de leche que hasta le sacó una sonrisa a Germán Martitegui. “Estoy muy feliz, muy contento. Un gran reconocimiento al esfuerzo, la voluntad. Juré por las nenas que no iba a llorar”, señaló el cantante recordando a Diego Maradona. 

Pero la sorpresa vino después cuando los reconocidos chef consideraron que había alguien más que merecía volver: Rocío Marengo, una de las jugadoras más picantes y estrategas que tuvo varios cruces con sus compañeros. Minutos antes de confirmar su nombre, la mediática rompía en llanto por la emoción que le provocaba la posibilidad de volver al reality. “Estoy feliz de la vida. Cuando yo me fui, vi sonrisitas mientras me despedía con mucha angustia. Voy por esas sonrisitas”, adelantó Rocío que en las semanas que estuvo afuera no dejó títere con cabeza. 

Superando a Iliana Calabró, Roberto Moldavsky y Nacho “Pantera” Sureda, se ganaron su merecida vuelta a la competencia. Si bien muchos apostaban al regreso de la Calabró, ya que a lo largo del concurso ha demostrado ser una gran cocinera, esta vez la receta le jugó una mala pasada. A pesar de sus ganas, primero se le cortó a crema que estaba batiendo, situación que le terminó quitando muchísimo tiempo y finalmente, a pesar de no bajar los brazos, terminó presentando una tarta a la que le faltó bastante horno. “La pasé muy lindo, yo ya me despido. Esto no me puede pasar a mí. Tengo mucha mano para la cocina pero corriendo contra el reloj el resultado no aparece”, cerró Calabró.